
Un cabecero tapizado
Para quitarle el barniz fue suficiente decaparlo con alcohol de quemar. El barniz original era suave y no tenía componentes que hiciera necesario el uso de decapantes más fuertes. No obstante use una cuchilla para eliminar el barniz de las estrías.
Di dos capas a brocha de goma-laca y la tercera, la hice con una muñequilla y lograr así un mejor resultado.
Llegado el momento de intervenir en la parte central se procedió a arreglar el agujero con un parche con un trozo de rejilla y pegado con pegamento de contacto
El siguiente paso fue forrar esta estructura con guata, de tal manera el tapizado iba a quedar más redondeado en sus extremos, también se grapó a la estructura.
Luego grapar la tela elegida. En este caso, opté por una tela de tono neutro y poder aportar color con otros elementos como cojines, pomos…
Para ocultar las grapas y embellecer la pieza se colocó un cordón elaborado con la propia tela empleada en tapizar y con ayuda de la pistola de calor se aplicó silicona líquida para adherirlo al tapizado.
Maribel Solano Montes
Pues ha quedado precioso. Esta mucho más moderno y bonito, y menudo trabajo relatado estupendamente paso a paso.